Día Mundial del Sueño

El pasado viernes, 13 de marzo se conmemoró el Día Mundial del Sueño que se celebra desde el año 2006. La intención con la que se instauró esta fecha en el calendario fue concienciar a las personas de la importancia de dormir bien. Un buen descanso en calidad y cantidad permitirá que afrontemos nuestras actividades del día a día con la máxima energía.La importancia del descanso para el ser humano está fuera de toda duda pero ¿sabemos cómo mejorar la calidad de nuestro sueño? Hoy vamos a dar unas pautas para que dormir no se convierta en una pesadilla.
La alimentación tiene un papel muy importante en la calidad del sueño que tenemos. Ingerir alimentos ligeros durante la cena hará que la digestión sea menos pesada. No es recomendable que nos acostemos justo después de cenar. Si lo hacemos aparecerá el temido reflujo ya que los alimentos no se habrán asentado todavía. Esto hará que estemos incómodos si nos echamos a dormir tras comer.

Nuestra postura al descansar también afecta a la hora de conseguir un descanso perfecto. Cada persona deberá adoptar la que le resulte más cómoda, es importante tener en cuenta que diversos estudios han puesto de manifiesto que la posición fetal y aquella en la que dormimos boca arriba con los brazos a lo largo del cuerpo como si fuéramos un tronco son las más recomendables para dormir. Según una investigación coordinada por la doctora Tomasina Stacey, las mujeres embarazadas descansarán mejor si lo hacen sobre el lado izquierdo de su cuerpo.

Día Mundial del Sueño

Otro factor a tener en cuenta para lograr un buen descanso será la temperatura de la habitación en la que descansamos. Tanto el frío como el calor pueden afectar a la calidad de nuestro sueño. Dormir en verano con el aire acondicionado encendido no es una conducta recomendable para el buen funcionamiento de nuestro organismo. La temperatura ideal es de 18 a 22 grados.
Para dormir lo recomendable es ir reduciendo el nivel de actividad de manera progresiva. Por eso recomendamos evitar realizar ejercicio físico intenso al menos 3 horas antes del descanso.
La ropa que llevamos cuando dormimos también influye en la calidad de nuestro sueño y descanso. Dependerá de la estación del año en la que nos encontremos pero deben ser prendas ligeras y frescas que nos permitan cambiar de postura en la cama con total libertad mientras dormimos.
Desde Pikolin queremos celebrar este día y compartir la importancia del sueño sobre nuestra salud. El sueño es el verdadero “taller” de nuestro organismo. Si tienes interés en conocer los procesos de recuperación que tienen lugar durante la noche visita esta página.