Dormir bien es importante para tu salud mental

La falta de descanso afecta a la sensibilidad y el estrés

Mientras dormimos, nuestro cerebro pasa por diferentes etapas que se repiten en ciclos de 90 minutos. Cada una de estas fases es fundamental para que nuestro organismo -corazón, cerebro, músculos, piel, circulación, etc.- se beneficie de ellas. No es por eso de extrañar que la interrupción continuada de estos procesos afecte a nuestra salud, siendo nuestro cerebro uno de los más perjudicados.

Las interrupciones prematuras del sueño alteran los niveles de producción de los neurotransmisores y del cortisol, la hormona del estrés. Por ello, si esta situación se repite con frecuencia, el pensamiento y la estabilidad emocional pueden verse afectados.

Estas complicaciones durante el descanso se denominan trastornos del sueño y los más comunes son los siguientes:

  • El insomnio, que se define como la dificultad para conciliar el sueño.
  • La apnea del sueño, es decir, una obstrucción física en las vías respiratorias que ocasiona constantes interrupciones del sueño.
  • Diversos síndromes de movimientos que interfieren en el descanso profundo.
  • La narcolepsia, que se caracteriza por la somnolencia y los repentinos ataques de sueño.

La relación entre trastornos del sueño y salud mental es bidireccional

El sueño y la salud mental están más relacionados entre sí de lo que se creía hace algunos años. El insomnio es, por ejemplo, un síntoma común en muchas enfermedades. Según un estudio publicado en la revista Biological Psychology, el 50% de las personas que lo padecen, sufren alguna enfermedad mental.

  • Depresión. Se estima que, de todos los pacientes con depresión, entre 65% y el 90% de los adultos y el 90% de los niños padece de algún trastorno de sueño. La mayor parte de este grupo sufre de insomnio, y uno de cada cinco, de apnea del sueño.
  • Trastorno bipolar. Quienes padecen de esta enfermedad suelen experimentar alteraciones del sueño antes o después de un episodio. Dependiendo de su estado anímico, pueden sentir una menor necesidad de sueño o, por el contrario, unas ganas excesivas de dormir, insomnio o cansancio extremo aún después de dormir.
  • Trastornos de ansiedad. El insomnio también aqueja a las personas que sufren de trastornos de estrés postraumático, obsesivo-compulsivo, de pánico y de fobias.

La importancia de cuidar tu sueño

Es habitual que al detectar un trastorno en el sueño se diagnostiquen otras patologías, ya que es lo primero que afecta. Por ello, es importante consultar con un profesional si sufres algún problema de sueño, independientemente de cuál sea la causa.

Como medida preventiva, es muy recomendable cuidar nuestros hábitos de vida: una dieta equilibrada, unos horarios regulares, un poco de ejercicio y dedicar las últimas horas del día a actividades más relajadas, pueden contribuir a aliviar considerablemente los síntomas.

Y algo que muchas veces no pensamos, en nuestro colchón, contar con el equipo de descanso más adecuado a tus necesidades y, en perfecto estado, ayudarán a garantizar la correcta calidad del sueño cada noche. Por ello trabaja Pikolin día a día, porque cuidar de tus sueños es cuidar de tu salud.