Por fin ya está aquí uno de los periodos más esperados del año: ¡Llegó el verano! Y con él, el sol, el calor, los festivales y, por supuesto, ¡las vacaciones! A todos nos encanta tener unos cuantos días libres, pero, más allá del ocio, las vacaciones son una necesidad. Las necesitamos para mantener una buena salud, física y mental.
No obstante, muchas personas terminan el periodo vacacional con el mismo estrés, si no más, que cuando este comenzó. ¿Por qué? Porque lejos de desconectar y bajar el ritmo, han seguido cargando sus días de tareas y de preocupaciones. Y es que no podemos pensar que las vacaciones por sí solas son beneficiosas, lo realmente importante es lo que hacemos con ellas.
A continuación, te damos las claves para que disfrutes al máximo este periodo, al tiempo que cuidas tu mente y tu cuerpo.
Deja todo hecho antes de irte del trabajo
Para descansar de verdad en vacaciones es vital olvidarnos de la rutina del resto del año y, en especial, del trabajo. Por ello, lo mejor es que dejes terminadas todas las tareas que puedas dentro de tu horario laboral antes de que comiencen las vacaciones…. Si no, las tareas pendientes pueden asaltarte en medio del descanso, convirtiéndolo en una auténtica tortura.
Disfruta de no hacer nada
¿Alguna vez has intentado desesperadamente descansar? Pasa lo mismo que cuando intentamos obligarnos a dormir, ¡es muy difícil! Cuando sentimos presión por desconectar, esto se convierte en un estrés en sí mismo. En vez de eso, te proponemos otra cosa: ¡no hagas nada!
Sí, puedes aprovechar las vacaciones para viajar, para ir a la piscina, para pasar tiempo con las personas importantes en tu vida… Pero reserva tiempo también para ti mismo y para la contemplación, para no hacer nada. Los expertos coinciden en que es sencillo y eficaz para conseguir una completa desconexión.
Y, ¿cómo hacerlo? Te damos algunas ideas:
- Levántate sin despertador.
- Come solo cuando tengas hambre.
- Sal de casa sin saber adónde vas, simplemente a disfrutar del entorno y de ti mismo.
- Duerme cuando sientas sueño.
- Sal a la naturaleza simplemente a admirar todo lo que hay a tu alrededor, sin ningún otro objetivo.
Duerme, pero duerme bien
Durante el año, a la mayoría se nos hace muy difícil, por no decir imposible, dormir lo suficiente. Aprovecha las vacaciones para hacerlo y hacerlo bien, ¡te lo mereces!
Duerme al menos 8 horas (10 si tu situación te lo permite), y hazlo cómodo y fresco, sin que tu sueño se interrumpa por un exceso de sudoración, por ejemplo. Para ello, debes equipar tu cama adecuadamente para esta época del año. Nuestras recomendaciones son:
- Productos hipertranspirables, confeccionados con Tencel®, una fibra natural con una capacidad única para absorber la humedad del sudor y liberarla rápidamente al exterior.
- Productos termorreguladores, que fusionan el Tencel® con el tratamiento termorregulador Thermic®, absorbiendo la humedad y manteniendo una temperatura constante dentro de la cama.
- Productos con aloe vera. Nuestra piel sufre en verano, especialmente con la exposición solar. Y el aloe vera la calma, refresca y regenera como ninguno.
- Sábanas y ropa de cama de 100% algodón, el tejido más tradicional, conocido por ser muy respetuoso con la piel.
Nada de trabajo
¡Desconecta! No pienses en nada que tenga que ver con el trabajo, céntrate en el aquí y en el ahora. Estás de vacaciones, ¡disfrútalo! Si es necesario, olvídate por unos días del teléfono móvil. Es más, te lo recomendamos, reduce su uso solo a lo imprescindible y verás como tu estrés baja considerablemente.
Cambia tu rutina
Dedica tu tiempo a hacer lo que más te gusta, eso para lo que quizás no encuentras suficiente tiempo durante el año, y genera nuevos hábitos placenteros y saludables, que podrás incorporar si quieres a tu rutina postvacacional.
Vuelve progresivamente a la rutina
Si tu estilo de vida y tu trabajo te lo permiten, cuando acaben las vacaciones ve poco a poco añadiendo tareas a tu día a día. Así, sin volver de golpe a la rutina, ¡podrías evitar la depresión postvacacional!
Agradece
Y… Si a pesar de todo, cuando terminan las vacaciones te cuesta levantar el ánimo… Agradece. Debería ser un hábito diario que durase todo el año. Hay muchos aspectos positivos, muchos de ellos simples, que podemos resaltar frente a los negativos. ¡Esta práctica ha demostrado ser eficaz contra el estrés, la ansiedad o la depresión!
