Cómo vencer la rutina

El cansancio y la rutina son dos de los mayores enemigos de las relaciones. Acabamos haciendo siempre lo mismo y posponiendo lo que nos hace felices para poder cumplir con nuestras obligaciones. De esta manera, las relaciones entran en una fase de cotidianeidad y podemos encontrarnos viviendo con un compañero de piso al que queremos mucho.

En esta fase, nos encontramos con lo que el psicólogo John Gottman llama “los cuatro jinetes del Apocalipsis”, aquellas cosas que debemos evitar para que una relación fracase. Las críticas destructivas, la actitud defensiva, el desprecio y la actitud evasiva son lo que según él lleva casi con total seguridad a que una relación se rompa. Pero, sin llegar a esos extremos, el simple hastío de vivir en un bucle en el que todo es lo mismo nos puede hacer plantearnos si realmente estamos satisfechos. Pero, por suerte, tiene solución.

Hacer algo diferente

La manera más fácil de no caer en la rutina es hacer cosas diferentes de vez en cuando. Tendemos a pasar todo el tiempo en casa, quedar con los amigos, trabajar hasta tarde… y lo más innovador que hacemos es ver la última serie de moda. ¿Y si, en lugar de eso, pasamos un día juntos en el campo, vamos a un spa o dedicamos la tarde a buscar entre libros de segunda mano algún libro que le guste al otro?

Además, hay empresas especializadas en crear planes especiales, como talleres de comida erótica, cursos de masaje en pareja, clases de baile, catas de vinos… e incluso supervivencia en caso de una invasión de zombies. Algunas parejas incluso tienen citas en las que actúan como si fuera la primera vez que quedan para sentir esas mismas mariposas que teníamos al principio.

Una maratón

Una relación no es una carrera de fondo, sino una maratón. Lo ideal es evitar llegar a situaciones en las que la rutina nos abrume y tengamos que recurrir a planes alocados para salir de la monotonía. Una idea fácil de llevar a cabo es tener un tarro de los deseos con cosas que nos gustaría que hiciese nuestra pareja. Sacar un par de deseos del tarro por semana ayudará a hacer pequeñas cosas nuevas que nos alegren a los dos el día.

Otra forma de romper con lo de siempre es despedirnos de manera diferente. Si cada día damos un beso a nuestra pareja de forma distinta, hacemos un pequeño baile o entonamos unas líneas de una canción, estará siempre expectante por lo que puede venir al día siguiente. Como siempre, son los pequeños detalles los que hacen que una relación sea un éxito.

En lo que respecta a hacer el amor, es mejor intentar no acudir a la típica cena con velas y vino, a no ser que sepamos que le encanta a nuestra pareja. Seguro que hay algo que quiera probar con lo que podamos sorprenderla o recrear aquella vez que fue tan especial. Hacer algo fuera de lo común es la clave para no dejar que la chispa muera.

Así lucharemos por que nuestra relación no se vea resentida por el paso del tiempo y conseguiremos tener siempre una pizca de novedad en nuestro día a día y añadir sorpresas que animen nuestra vida diaria. Si además ponemos cariño y respeto y nos aseguramos de disfrutar de la vida y de nuestro amor en pareja, tendremos todos los ingredientes para la felicidad en pareja.